Los voluntarios y voluntarias dedican su tiempo a hacer que las personas que visitan se sientan más a gusto. Ahora que no pueden verlos y deben quedarse en casa, han encontrado formas de seguir estando cerca. Los voluntarios y voluntarias del Parc Sanitari SJD, por ejemplo, han hecho decoraciones para hacer más agradables los geriátricos de las personas mayores que antes visitaban.
Junto con familia, vecinos y amigos han elaborado 1.500 mariposas de colores diferentes con cartas para decorar los espacios de las residencias geriátricas y hacer así que los espacios sean humanos y agradables. De este modo, hacen que las personas se sientan más a gusto y más acogidas pasando el tiempo en las residencias. Esta no es la única acción que han hecho. Además de seguir acompañando a usuarios y usuarias a través de llamadas telefónicas y mensajes de ánimo, el voluntariado de el Parc Sanitari Sant Joan de Déu ha estado trabajando mucho estas últimas semanas.
Con campañas como Las Caras de la Vulnerabilidad podemos ayudar a las personas en situación más vulnerable y hacer más fácil el día a día de mucha gente. Tal y como han hecho estos voluntarios, queremos estar cerca de quien más lo necesita. Desde el confinamiento, han desafiado la distancia física para tenerlos cerca y transmitir que no les olvidan. Con unas decoraciones han conseguido hacer lo que hacen siempre: hacerles sentir como en casa, estar cerca y hacer más agradable su día.