Juanjo Ortega | Director de la Obra Social de San Juan de Dios
El resumen de la actividad de Solidaridad SJD es siempre una chispa de esperanza en un mundo tan hostil como fraternal. Los humanos vivimos en esta dualidad: la de las crecientes injusticias provocadas por la codicia de unas pocas personas y la de la hospitalidad sin condiciones de una mayoría de buena gente, empresas e instituciones, que no son indiferentes a la vulnerabilidad de sus vecinos y vecinas. Esto lo vivimos de cerca y con una intensidad tormentosa, este 2024, con la dana que sufrieron, de forma especialmente intensa, muchos pueblos de Valencia.
Esta solidaridad hace que las comunidades humanas seamos tan resilientes como lo somos de vulnerables; frente a una catástrofe, la solidaridad emerge como la espuma del mar en una tormenta. Aparece por todas partes, espontáneamente, sin planes. Después llegamos las entidades, que complementamos esta respuesta tan humana y tan humanista para poner estrategia, medios y procesos. Porque la solidaridad tiene muchas capas: la de las personas que actúan individualmente desde la discreción y la buena voluntad, y la de las organizaciones, que lo hacemos de forma estratégica y desde las diversas experiencias.
En San Juan de Dios no somos especialistas en atender estas grandes emergencias repentinas, pero nos ponemos cuando tenemos presencia en el territorio y capacidad de acción. Lo que mejor nos define es nuestra acción de lluvia fina, atendiendo y acompañando las vulnerabilidades del día a día, aquellas que tienen un origen estructural a consecuencia de un déficit de derechos sociales, como son la falta de vivienda, de oportunidades laborales, de atención sanitaria o sociosanitaria adecuada o, simplemente, la libertad de ser como se es, sin sufrir.
En este resumen de actividad encontrará ambas cosas: la acción diaria de San Juan de Dios, sensibilizando y captando recursos para financiar más de 250 proyectos sociales y sanitarios, y la reacción explosiva a una catástrofe más estructural que natural, como fue la repentina inundación de una zona inundable. Y ambas tienen algo en común: son el resultado de la solidaridad de miles de personas y organizaciones que caminan a nuestro lado y nos ayudan a transformar el mundo de la única forma posible, a golpe de buenas acciones.
*Editorial del Resumen de actividad 2024.
