La campaña ‘La vida misma’ ha incorporado testimonios reales que visualizan y desgranan las claves de la exclusión social. A través de veinte vídeos, personas atendidas en diversos centros de acogida o en situación de vulnerabilidad, o bien personas próximas a estos centros, cuentan su experiencia y nos narran una realidad que es más cercana de lo que imaginamos.
Los testimonios
Entre otros, puedes conocer la experiencia de Vicente Ramón, exresidente del albergue Santa María de la Paz de San Juan de Dios. Vicente era vendedor de antigüedades hasta que llegó la crisis, perdió dinero y se quedó sin hogar. Explica que en el albergue encontró una familia con la que, ahora que ha recuperado su vida, todavía sigue en contacto.
También puedes conocer a MªJesús Melgar, voluntaria de la Fundación Jesús Abandonado de Murcia. Ser voluntaria le cambió su visión sobre las personas en situación de sin hogar y ha aprendido a no juzgar a las personas acogidas. Con su experiencia ha roto todos los estereotipos sobre las personas en situación vulnerable.
Sonia Lluta, trabajadora del Hospital San Juan Grande de Jerez, nos abre las puertas a la crisis que vivió su familia. Primero perdió su trabajo el padre de su hijo y más tarde ella, se vio obligada a dejar el piso donde vivía porque el alquiler era excesivo. Fue en ese momento, cuando ya no podía pagar las facturas, que fue usuaria de los servicios sociales de San Juan de Dios. Fue voluntaria, y más tarde comenzó a trabajar.
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La campaña
‘No todas las personas tenemos la misma vida, pero todas somos parte de la vida misma’ es el lema de la campaña de sensibilización ‘La vida misma’ que comenzó el pasado mes de mayo en el CaixaForum Madrid a nivel estatal y que ya ha llegado a más de una decena de ciudades.
Se trata de una campaña que, visibilizando la realidad de las personas sin hogar y en situación de vulnerabilidad en todo el Estado, tiene el objetivo de romper estereotipos y mostrar que estas personas viven situaciones más cercanas a nosotros de lo que piensa la ciudadanía en general, mostrando cómo podemos ayudarlas con pequeños gestos.
Además de una exposición itinerante, ‘La vida misma’ se estructura en torno a una página web que recoge información y, también, vídeos testimoniales que muestran la diversidad de perfiles que se esconden bajo el paraguas de las personas sin hogar y en situación de vulnerabilidad. Este 2019 la exposición se podrá visitar en Barcelona, Valencia, Zaragoza, Pamplona y Lérida.
Actualmente San Juan de Dios atiende más de 13.000 personas sin hogar cada año a sus 12 centros residenciales que tiene en todo el Estado. Aparte de dar apoyo sanitario, psicosocial y de acompañamiento integral en su proceso rehabilitador y de integración social.
También, y debido a la difícil situación que han sufrido miles de personas a raíz de la crisis económica, San Juan de Dios amplió su red de asistencia social para personas en situación de vulnerabilidad. Actualmente se atienden cerca de 45.000 personas en los más de 20 centros donde se ofrecen servicios de higiene y salud, garantía alimentaria, acompañamiento para la inserción laboral, atención a familias monomarentales y niños, entre otros.