La Llar Sant Joan de Déu de Manresa, dispositivo de la Fundació Germà Tomàs Canet, estrena nuevos espacios tras la reforma que se ha llevado a cabo los últimos meses.
El cambio más relevante es que las personas atendidas en el Programa d’Atenció de Persones Refugiades pasarán de un modelo residencial de dormitorios con espacios comunes a vivir en apartamentos. De este modo, se quiere fomentar su autonomía, mejorar su comodidad y hacerlas protagonistas de su proceso de recuperación. Con esta remodelación, la Llar Sant Joan de Déu se convierte en un espacio de referencia en la Cataluña Central para la atención personalizada al servicio de la inclusión social. Se ha buscado que los nuevos espacios sean de calidad, acogedores y confortables, de forma que las personas atendidas puedan sentirse tranquilas, acogidas y respetadas.
Hasta ahora, la Llar Sant Joan de Déu se organizaba con dormitorios y espacios y servicios comunes (comedor, lavandería, etc.). Pero esto suponía una limitación en la hora de promover la autonomía y el empoderamiento de las personas y familias acogidas, puesto que estas se tenían que adaptar a los ritmos organizativos de la Llar. Es por eso que se planteó crear espacios con baños y cocina, de diferentes medidas, que permitan a las familias acogidas vivir como lo harían en un piso y organizar ellas mismas su ritmo de vida.
Con la remodelación, los nuevos espacios de la Llar incluyen nueve apartamentos de una habitación, dos de dos habitaciones y dos de tres habitaciones, además de una lavandería de autoservicio. Aparte, se mantienen habitaciones dormitorio con servicios de baños y comedor comunes, porque la financiación obtenida ha permitido la remodelación de una parte de los espacios, no la totalidad.
Un espacio más sostenible y abierto al barrio
Se han aprovechado las obras para mejorar la sostenibilidad del edificio y su eficiencia energética. Concretamente, se han sustituido las ventanas, se han instalado placas fotovoltaicas en el tejado y se ha puesto en marcha un sistema de climatización por aerotermia más eficiente y sostenible. También se han llevado a cabo diferentes acciones para mejorar la accesibilidad del centro.
Con el objetivo de facilitar la interrelación de las personas que viven en la Llar con el vecindario y favorecer su integración social, en un futuro próximo se abrirán en el barrio los jardines del Hogar, que cuentan con zonas verdes y un espacio de parque infantil. Las primeras familias se instalarán pronto en los nuevos espacios.
La directora de la Fundació Germà Tomàs Canet, Anna M. Prats, ha dicho que el nuevo espacio “es un paso adelante que permitirá ofrecer un mejor acompañamiento a las personas acogidas”. El director de la Unidad Territorial UTI de la Orden Hospitalaria de San Juan de Dios, Emili Bargalló, ha destacado que el proyecto pone en el centro el concepto de hospitalidad, alrededor del cual se despliega toda la tarea que la Orden lleva a cabo.
Esta reforma ha sido posible gracias al Fondo Europeo Next Generation, al Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia del Gobierno de España y a la Orden Hospitalaria de San Juan de Dios, entre otros.
La Llar Sant Joan de Déu
L’equipament se situa a l’antic Convent de les Saleses de Manresa i compta amb programes i serveis adreçats a col·lectius vulnerables o en risc d’exclusió. Entre ells s’hi troben el Programa d’Atenció de Persones Refugiades, que durant el 2023 va atendre i acompanyar més de 400 persones de 26 nacionalitats diferents, el Centre Residencial d’Emergències Socials, un servei concertat amb l’Ajuntament de Manresa que dona suport a famílies i persones que es troben en situació de sense llar de manera sobrevinguda, el servei de Dutxes i Bugaderia Socials, que atén les necessitats d’higiene de les persones que ho necessiten, i la Unitat Dependent del Bages, que ofereix residència i suport a la integració sociolaboral a les persones en tercer grau de tractament penitenciari.
La equipación se sitúa al antiguo Convent de les Saleses de Manresa y cuenta con programas y servicios dirigidos a colectivos vulnerables o en riesgo de exclusión. Entre ellos se encuentran el Programa d’Atenció de Persones Refugiades, que durante el 2023 atendió y acompañar más de 400 personas de 26 nacionalidades diferentes, el Centre Residencial d’Emergències Socials, un servicio concertado con el Ajuntament de Manresa que apoya a familias y personas que se encuentran en situación de sin hogar de manera sobrevenida, el servicio de Duchas y Lavandería Sociales, que atiende las necesidades de higiene de las personas que lo necesitan, y la Unitat Dependent del Bages, que ofrece residencia y apoyo a la integración sociolaboral a las personas en tercer grado de tratamiento penitenciario.