Llicenciada en Periodisme i Humanitats. La seva trajectòria vital sempre ha estat vinculada a l’àmbit social i educatiu. Ha treballat durant més de 15 anys a entitats del tercer sector i des del 2012, forma part de l’equip de l’Obra Social Sant Joan de Déu com a responsable de sensibilització. Està convençuda que, com deia Paulo Freire, cal desenvolupar una pedagogia de la pregunta. Perquè només qüestionant-nos permanentment el món, arribarem a trobar respostes.
Diana Casellas | Responsable de sensibilització de l'Obra Social Sant Joan de Déu
¿Cuál es el alma del proyecto?
#YoCambioTodo es una serie documental destinada a jóvenes donde los propios jóvenes hablan de su experiencia con la salud mental, el sinhogarismo, las enfermedadades degenerativas, las enfermedades de transmisión sexual, las migraciones y la diabetes. Y como el contacto con estas realidades los ha hecho a menudo la vida más difícil, sobre todo por la reacción social del entorno. La serie se enmarca en el proyecto www.latidos-sjd.org, un espacio web transformador que busca sensibilizar la sociedad sobre las temáticas que trabaja San Juan de Dios.
¿Con qué objetivo nace #YoCambioTodo?
Las 7 historias que conforman #YoCambioTodo tienen como objetivo romper estigmas y acercar a los jóvenes a realidades a menudo desconocidas o ignoradas, abriendo la reflexión de qué rol jugamos cada uno de nosotros en los procesos de exclusión social. Queremos huir del “mira qué les pasa a estas personas” e ir hacia un “qué nos pasa a nosotros en relación a lo que esta persona explica”. Al final, para que hayan procesos de exclusión es porque alguien, con intención o sin ella, haga sentir excluido/a al otro con su actitud o comportamiento. Esta serie en concreto da voz a una nueva generación que rompe estereotipos para avanzar en la construcción de un mundo más solidario. La serie, que pone el foco en los jóvenes y su lenguaje, pretende despertar una nueva conciencia social alrededor de realidades diversas y a menudo poco conocidas.
¿Qué quiere decir hacer sensibilización?
Para mí el objetivo último de la sensibilización es contribuir a cambiar el mundo desde nuestra pequeña parcela. Y para hacerlo hacen falta tres ingredientes: pensar, sentir y actuar.
Es decir, para poder ser agentes de cambio, primero hay que conocer, dejarse tocar por las realidades que se quieren transformar, entenderlas desde su complejidad y perder el miedo. Después, inevitablemente, surge la pregunta de qué tiene que ver todo esto con cada uno de nosotros. Y a menudo descubrimos que, en un mundo interdependiente, cosas sin relación aparente tienen mucho que ver entre sí. Y está bien ser conscientes en la toma de decisiones cotidianas y en nuestra actitud ante la vida, bien sea porque son realidades mucho más próximas de lo que pensábamos, bien sea porque con nuestra actitud estamos contribuyendo a perpetuar situaciones de exclusión, o bien estamos abriendo la puerta a cambiarlas.
¿Qué se aprende de los personajes que han participado?
Si se quiere sensibilizar sobre una realidad, es importante hacerlo desde la mirada y con la participación de las personas afectadas. Para nosotros, en este tipo de proyectos, el proceso es tan importante como el resultado final. Además, cuando ofreces la opción a las personas de expresarse y hablar de su realidad y vivencia, descubres muchas cosas que con tu mirada sería imposible de ver. En este sentido, los 7 protagonistas de la serie nos han enseñado y removido muchas cosas. Para ellos ha estado también una experiencia muy bonita de ver como su vivencia, dolorosa en muchos casos, sirve para cambiar las cosas y hacernos cuestionar la manera en que pensamos y como nos relacionamos con estas temáticas.
¿Cómo los seleccionasteis?
En la identificación de estos jóvenes fue muy importante el rol de los centros SJD y sus profesionales, que son quienes están en contacto diario con estas personas.
Teníamos claro que necesitábamos identificar historias de superación y cambio, pero no de superhéroes. Los protagonistas son personas normales, que con sus diferencias se asimilan a cada uno de nosotros y nos hacen de espejo. Con sus historias nos contraponen con nuestros miedos, nuestras luchas e inseguridades. Pero en un mundo regido por la imagen, la perfección y la autosuficiencia, y todavía más entre los jóvenes, no es nada fácil desnudarse y mostrar esta parte vulnerable de uno mismo. Por lo tanto, hay que agradecer muchísimo a los 7 jóvenes la valentía y el coraje de abrir su corazón y compartir con cada uno de nosotros una parte íntima de su vida. Al final, la vulnerabilidad es uno de los pocos espacios comunes que compartimos todas las personas por el simple hecho de ser humanos. Y esto es el que hace que la serie tenga éxito.
¿Por qué se ha apostado por un formato vertical?
Si haces un proyecto dirigido a jóvenes, es importante hablarles con sus códigos, formatos y canales. Partíamos de la base de la innovación y que nos sirviera este proyecto para testar aspectos que no nos atreveríamos a hacer con otros, como por ejemplo explorar el formato vertical que es el que utilizan los jóvenes con sus móviles. Por eso, todos los videos se han grabado con el doble formado, horizontal y vertical. También se han priorizado las redes sociales, con un perfil propio a Instagram y Youtube (@latidossjd). Si quieres conectar con jóvenes, tienes que ir donde son ellos, no esperar que vengan.
Explica el lema #YoCambioTodo
Para mí, el lema tiene mucho que ver con la energía de los jóvenes y la certeza de que depende de ellos cambiar el mundo y que es posible hacerlo. Queríamos poner el foco en las experiencias personales, en el granito que cada cual aporta para cambiar la mirada social sobre aquello que nos explica. Pero el “yo” no hace referencia solo a los 7 protagonistas sino que, de alguna manera, nos invita a todos a reflexionar qué podemos hacer para contribuir al cambio.
El día de la presentación del proyecto en el cine Texas fue muy emocionante ver la magia y complicidad que se creaba entre los propios protagonistas, algunos de ellos ni se conocían. Fue la toma de conciencia colectiva de compartir un mismo objetivo: un “yo” que quiere cambiar el mundo y un “yo” que se deja tocar por las experiencias de otros.
¿Qué acogida está teniendo?
Desde el lanzamiento del proyecto en abril se han contabilizado ya más de 200.000 visualizaciones de los videos, lo cual está muy bien. Pero el proyecto va más allá del visionado de los videos. Por eso, estamos trabajando en varias líneas que permitan a los jóvenes profundizar en las temáticas y dar respuesta a alguna de las preguntas que despierta la serie: desde acercar los protagonistas a los centros educativos que ya trabajan con nosotros a través de EducaSJD, a organizar debates que sirvan para aterrizar qué hace San Juan de Dios con estas realidades y que podemos hacer cada uno de nosotros.