Hasta el 2 de febrero, la iniciativa ‘Cèntims solidaris‘, recogerá microdonativos mediante el redondeo de las compras realizadas con targeta de crédito, para mejorar la salud física y emocional de las familias refugiadas acogidas en la Llar Sant Joan de Déu de Manresa.
Los clientes y clientas pueden realizar estas aportaciones de forma voluntaria y confidencial en el momento del pago de su compra en la caja del supermercado o, también, de manera online a través de su portal web.
Oriol Bota, director de la Obra Social de Sant Joan de Déu afirma que “hoy, que todavía estamos sufriendo las consecuencias de una pandemia, cuidar y acompañar tiene más sentido que nunca. En el caso de las personas refugiadas, que llegan a nuestro país huyendo de situaciones de persecución, guerra o desastres naturales, los efectos son doblemente devastadores. Al proceso migratorio se suman los efectos y limitaciones causados por la COVID-19. Iniciativas solidarias, como el programa céntimos solidarios de Caprabo, nos ayudarán a hacerles un acompañamiento especializado para que puedan hacer un uso correcto de nuestro sistema de salud pública y cuidar de su salud mental y emocional. Toda pequeña aportación cuenta”.
La Fundación Germà Tomàs Canet gestiona la Llar Sant Joan de Déu de Manresa, uno de los centros de San Juan de Dios en Cataluña que lleva a cabo el Programa de Protección Internacional desde finales de 2017 y que acoge anualmente a 310 personas, de las que el 52% son mujeres y más de la mitad son menores de edad.
San Juan de Dios no sólo cubre las necesidades básicas, su compromiso va más allá en su integración y se concreta con apoyo en aspectos como la escolarización, entre otros. También, ofreciendo orientación sanitaria, ya que la somatización de todo el estrés acumulado por el proceso migratorio acaba dando muchos problemas de salud, que deben orientarse hacia los servicios sanitarios que mejor los puedan atender.
Cristina Madrilley de RSC de Caprabo, reconoce que “desde Caprabo somos muy conscientes de la importancia de hacer frente a la situación de vulnerabilidad que sufren muchas de las personas refugiadas que llegan a nuestro país. A través de la colaboración con entidades como San Juan de Dios, reforzamos nuestro compromiso social y luchamos para que todas las familias tengan acceso a la educación, sanidad y ocio adecuados”.